miércoles, 25 de julio de 2018

2° AL 10° PREMIO I CERTAMEN INTERNACIONAL DE MICRORRELATOS A LA PAZ






SEGUNDO PREMIO


SUPLANTACION


Me odiaba sin intermitencia cuando yo salía de paseo al río o a la montaña y mi orgullo lesionado, replicaba sus querellas. Un buen día desarmé mi alma belicosa y al atreverme a calzar sus zapatos para armonizar con la naturaleza, observé que expulsó toda su emoción represada y lloraba como niño cuando con ellos la cima coronaba…
En noche regresaba y presto me los quitaba con respeto, devoción y secaba en la hoguera de su corazón palpitante esos zapatos que estrené por él quizás porque le tallaban, grandes le quedaban… o bien porque al fin encontraron unos pies.


 GONZALO PRIETO BARRERA
  Cedritos, Bogotá, Colombia.




TERCER PREMIO

El Otro

Uniformados y orgullosos, todos ellos, fueron a defender a su patria ante aquellos que se erigían como enemigos, sin tanta claridad de las causas, pero con un objetivo preciso y concreto, conseguir el emblema del triunfo, escribiendo una letra más en el libro de la historia. Letra minúscula, pero… letra al fin.
Desembarcados en la estratégica isla plena de adversarios, armados y beligerantes, se dispusieron a llevar a cabo la proeza, negando miedos y semejanzas.
Un maremoto violento sorprendió a todos los soldados. No supieron que hacer. Muchos se abrazaron entre sí, borrando diferencias y olvidando la batalla.




Inés Susana Fragassi

Ciudad Autonoma de Buenos Aires




CUARTO PREMIO 

EL SILENCIO DEL GENERAL     


Cuando el niño preguntó al General para qué servían los ejércitos, le respondió que servían “para luchar en las guerras”. Cuando preguntó para qué servían las guerras, le respondió: “para vencer al enemigo”. Cuando volvió a preguntarle qué nació primero: la guerra, los ejércitos… el General guardó silencio.

José Luis Chaparro González
 (Badajoz) ESPAÑA



QUINTO PREMIO


LA ÚLTIMA BATALLA

Cuenta la leyenda que, a mediados del siglo XXI, se libró la última batalla en el Planeta Tierra. Los líderes de Oriente y Occidente se enfrentaron mano a mano, ya que ambos habían perdido a sus ejércitos y pueblos enteros a causa de los interminables conflictos bélicos.
Allí, frente a frente, usaron las pocas balas y bombas que les quedaban y se ultimaron mutuamente. Fue la extinción de la especie.
Al día siguiente, sobre la devastada epidermis del planeta, germinó la primera flor. Así nació definitivamente la Paz, esa que muchos humanos soñaron pero ninguno pudo conocer.





 Bossa, Jorge Emilio
 San Francisco (Cba. – R.A.)



SEXTO PREMIO

El tren pacifico

Había una vez un hombre el cual viajaba siempre en tren al trabajo, un trabajo que el odiaba puesto que no quería bajar nunca, él quería quedarse ahí por siempre porque ahí encontraba su paz. Un hombre con grandes problemas, con pocas ganancias económicas, abandonado por su familia por lo que está solo en su día a día. Odia su trabajo puesto que es un exmilitar que paso 4 años en Afganistán y al volver, tuvo que enfrentar 7 años de prisión por asesinar a un hombre en defensa propia, pero él es feliz por el tren.


Alonso Sáenz Villarruel  
 Guadalajara, Jalisco.  México


SEPTIMO PREMIO

Valentía

–Papá, ¿por qué existe la guerra?
–Porque al crecer las personas dejan de hacerle caso a su corazón.
–¿Y por qué lo hacen? –Porque en algún momento los lastimaron y temieron que les volviera a pasar. Prefirieron guardarlo y no sacarlo más.
–¿Y ya no podrán sacarlo?
–Claro que sí, pero hay que ser muy valiente para eso.
–¿Y no lo son?
–Todos lo somos, pero hay veces que elegimos no serlo.
–¿Por qué, papá? –Es más fácil.
–¿Entonces son flojos? –No, no, tienen miedo.
–¡Pero también las personas que están ahí! –Yo lo sé, hija.
–¿Entonces?
–Ellos no.





Rebeca Monserrat Uribe Cortés
 Mexicana



OCTAVO PREMIO

SIN UNIFORME

“Tiró sus medallas al suelo, se quitó el uniforme y se dio media vuelta.
Si me consideran un traidor, fusílenme, pero que les quede claro: yo pienso que las guerras no llevan a ninguna parte…”
¿Y qué le pasó después?
Hicieron lo mismo: despojarse del uniforme…, y se rebelarse contra la guerra.
¿Y cómo lo hicieron? ¿Fue una buena decisión? ¿El soldado sigue vivo? Abuelito, dime.
Demasiadas preguntas para una sola noche. Sólo te diré que sí, fue buena. La mejor que he tomado en mi vida. Ahora vete a dormir.




 André López García
Mexico




NOVENO PREMIO

ESTACIONADO EN EL RECUERDO DE AUSCHWITZ


Los cuatro polizones del penúltimo de cola se miraron unos a otros con las caras desencajadas. Una voz hueca había roto el silencio de aquel desnudo contenedor: <<Sí, les he hablado yo. Sé que nadie en su sano juicio escucharía a un vagón de tren, pero necesito contarles mi historia...>>


Rubén Martín Camenforte
  Terrassa (Barcelona) España



DÉCIMO PREMIO    


CUENTOS DE HADAS.

La voz de la abuela distiende la penumbra. Guadalupe y Lucas se aprietan en su abrazo, refugio seguro contra el miedo.
—En la cocina transparente de sol, mi mamá me preparaba la chocolatada. La leche jugaba a los remolinos con el chocolate. Yo cortaba rodajas de pan crujiente y esponjoso, y las untaba con manteca. Desayunaba, besaba a mamá y me iba a la escuela. Ahí leíamos, escribíamos en cuadernos de colores, jugábamos a la mancha…
Afuera siguen cayendo las bombas. En la leve protección del sótano, la abuela desgrana cuentos de hadas.




Gisela Lupiañez
 Luján de Cuyo. Mendoza. Argentina.





2 comentarios:

  1. Buenos días querria saber donde se puede consultar los resultados del puesto 11 ala 20 en este certamen de microrrelatos. Muchas gracias.

    ResponderEliminar
  2. El jurado decidió premiar hasta el 10 premio y dar algunas menciones especiales

    ResponderEliminar